domingo, 4 de octubre de 2009

Carpe diem

¡Hola a la concurrencia!
Me ha ocurrido una cosa espantosa; después de estar todo el puñetero verano esperando a terminar de trabajar para poder gozar de mis 5 días de auténticas vacaciones en el entreacto vacaciones-comienzo de curso, voy y me pongo mala. ¡¡Ah, destino cruel!!
De nada me sirvió pensar "en esos 5 días voy a hacer esto y lo otro, y el domingo pienso hacer lo de más allá", porque el viernes un dolor de cabeza nada convencional para mí se instaló detrás de mis ojos y consiguió inutilizar el fin de semana. El típico dolor corporal y mareo, porque ni siquiera la fiebre se ha dignado a visitarme, así que encima me rodea un halo de patetismo que no soporto. Adiós a hacer punto de cruz, a ir al rastro, a ir a cenar a casa de mis suegros, a montar en bici y a un sinfín de actividades no provechosas.
La vida, desde luego, a veces es así. Te pasas la mitad de tu existencia haciendo planes de lo que harás mañana, pasado, la semana que viene, el mes próximo, dentro de un año, y de nada te sirve. Aunque igual ahí está la gracia del asunto y su moraleja; deberíamos preocuparnos menos por el futuro, que lo único que consigue la mayor parte de las veces es agobiarnos, y procurar vivir más el día a día. Carpe diem, quam minimum credula postero, que diría Horacio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Plantilla original blogspot modificada por plantillas blog